Italia 2008

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ITALIA – 3 al 29 de junio de 2008


PREVIO

Este viaje a Italia lo hemos contratado a través de  http://www.occius.com/ , una agencia de viajes de Valladolid. En concreto, ha sido Jorge el que me lo ha organizado todo según yo le iba diciendo los sitios que queríamos visitar. Aprovecho para darle las gracias porque ha estado todo genial.

Hemos contratado todo con ellos, vuelos, hoteles y coche de alquiler.


DIA 1 – Martes 3 de Junio – Venecia

Llegamos al aeropuerto de Bilbao. Nuestro avión a Madrid sale a las 13:45, pero como llegamos con tiempo y hay sitio, nos meten en el vuelo anterior que sale a las 12:20, así tenemos más tiempo para el enlace con Venecia. El avión sale puntual. En una hora estamos en Madrid en la T4. Tenemos hasta las 16:20, así que damos una vuelta y vamos a comer. El avión a Venecia también sale a la hora. Los dos vuelos son de Iberia. A las 18:30 llegamos a Venecia, hay 24 grados y está nublado: el aeropuerto es pequeño. Cogemos las maletas y en la salida están las taquillas para los hidrotaxis, a la izquierda hay un quiosco y en frente, las taquillas para los vaporettos y autobuses. Cogemos un bono para 72 euros que vale para vaporetto y bus. Son 31 € cada uno. El viaje individual en vaporetto vale 6,5 €. No admiten tarjetas.

En la parada del autobús hay una máquina para validar el billete. Como es un bono, lo validas una sola vez y cuenta el tiempo desde ese momento. Cogemos el bus nº 5, justo al salir del aeropuerto en frente. Llega hasta piazzale Roma, que es la central de autobuses de Venecia. Desde que bajas del autobús, no está indicado donde se cogen los vaporettos, así que nos hacemos un poco de lío. Incluso, preguntamos a un heladero y nos lo dice mal (muy simpáticos los venecianos,…). Vemos a un grupo que va con guía en castellano y le preguntamos. Tenemos que atravesar la plaza. Aquí está el polémico puente de Calatrava, que está sin terminar. Tenemos que ir a Canareggio (barrio judío). Cogemos el vaporetto nº 1 y nos bajamos en Marcuola. Siguiendo las indicaciones de la web del hotel, llegamos sin problemas. Eso sí, tenemos que atravesar un para de puentes con sus correspondientes escaleras y con las maletas, cuesta un poco.

Llegamos al hotel sobre las 20. Es el Ai More D’Oriente en Cannaregio 3319 – Fondamenta della Sensa – 30121 Venecia. Web: www.morihotel.com


La habitación no está mal, es como la foto que viene en la web, aunque para ser un 4 *, no tiene nada que ver con los de España.

Dejamos las maletas y nos vamos andando hasta la estación de tren (unos 10 minutos) de Santa Lucía, Ferrovia. Tenemos que comprar los billetes para ir a Florencia el viernes. Son las 21 y las taquillas están cerradas. Las compramos en las máquinas amarillas automáticas. Se puede elegir idioma y hay en español, así que, sin problemas. Compramos dos billetes para las 8:45. Cada uno son 34 € y se puede pagar con tarjeta.

De ahí , paseamos un poco y buscamos un sitio para cenar. Entramos en una pizzería, pedimos una 4 quesos y una carbonara y dos coca colas. Pagamos un poco más de 25 euros. Cobran el cubierto (1.6)  y el servicio (10%) aparte. La pizzería se llama Ae Oche y está en Cannareggio  158/A. Está bien, pero bueno, tampoco nos hemos molestado en buscar mucho, porque estamos cansados y tenemos hambre.

Después de cenar, cogemos el vaporetto nº 1 hasta Plaza San Marcos. A esta hora no va tanta gente y vamos viendo todos los palacios de noche. Muy bonito, merece la pena, hacer este recorrido cuando ya está oscuro. Cuando llegamos, vemos que justo sale de vuelta el último (23:25), así que lo cogemos y nos volvemos al hotel a dormir.

En la parada del autobús hay una máquina para validar el billete. Como es un bono, lo validas una sola vez y cuenta el tiempo desde ese momento. Cogemos el bus nº 5, justo al salir del aeropuerto en frente. Llega hasta piazzale Roma, que es la central de autobuses de Venecia. Desde que bajas del autobús, no está indicado donde se cogen los vaporettos, así que nos hacemos un poco de lío. Incluso, preguntamos a un heladero y nos lo dice mal (muy simpáticos los venecianos,…). Vemos a un grupo que va con guía en castellano y le preguntamos. Tenemos que atravesar la plaza. Aquí está el polémico puente de Calatrava, que está sin terminar. Tenemos que ir a Canareggio (barrio judío). Cogemos el vaporetto nº 1 y nos bajamos en Marcuola. Siguiendo las indicaciones de la web del hotel, llegamos sin problemas. Eso sí, tenemos que atravesar un para de puentes con sus correspondientes escaleras y con las maletas, cuesta un poco.

VENECIA - SESTIERI

Venecia surge sobre un archipiélago de cerca de un centenar de isletas, de varias formas y tamaños, separadas por nu­merosos canales (“rii”). El principal es el en que se asoma la mayoría de los palacios más bonitos. Se llama Canal grande, tiene forma de S invertida y divide la ciudad en dos partes de­siguales. En otoño y en primavera, la marea, que por si misma es suficiente a limpiar los canales (si no el agua se estancaría) causa a menudo el fenómeno del Agua alta: Plaza San Mar­cos y otras zonas de la ciudad se inundan y es necesario poner pasarelas para que la gente pueda pasar.

La ciudad no está dividida en los tradicionales 4 barrios, sino en 6. Por eso se llaman “SESTIERI”: San Marco, Castello, Cannaregio, S. Croce, S. Polo e Dorsoduro. Los PUENTES son cerca de 400 y solían estar hechos de madera y de una manera tal que los caballos pudieran cruzarlos también. Fue sólo a partir de 1486 que empezaron a construirlos de mampostería. Casi todos tienen un poderoso parapeto a los lados a excepción de dos: uno en el sestiere de Cannaregio, en la fondamenta de S. Felice, y el otro en Torcello (el Puente del Diablo).

Las CALLES son sin duda una de las características de la ciu­dad: las muy estrechas se llaman Calli o Callette, la fonda­menta son las calles a lo largo de los canales porque están adyacentes a los cimientos (“fondamenta”) de las casas. Salizzada deriva de empedrado (“selciato”) y recuerda las primeras calles pavimentadas. Ruga (del francés rue) indica las calles flanqueadas por palacios y tiendas. Un Rio terá es un canal cegado y Piscine solían ser espejos de agua. Sólo la de San Marcos se llama Plaza: en los demás casos se llaman Campi o Campielli.




DIA 2 – Miércoles 4 de Junio – Venecia

Nos levantamos sobre las 8:30 y bajamos a desayunar. Aquí, sí se notan las 4 estrellas del hotel, ya que el buffet tiene muchas cosas y ricas, yogures, bollos, cereales, frutas, embutidos, etc. Después de desayunar, cogemos otra vez el vaporetto nº 1 desde Marcuola hasta San Marco. El día está nublado, pero hace resol. Hay muchísima gente por la plaza. Como la basílica está cerrada por motivos de culto hasta las 13:30, nos vamos al Palacio Ducale. La entrada cuesta 13 €.



Aquí estamos unas 2 horas, tiene como 2 partes, una, las estancias del palacio y otra, la cárcel, con el puente de los suspiros. Esta parte es la que más nos gusta, están las mazmorras y se cruza el puente de los suspiros, como hacían los presos por última vez. Merece la pena entrar al palacio, sobre todo por ver las mazmorras. Desde dentro, vemos que se ha puesto a llover. Para cuando salimos, ya ha parado.

Vamos a la basílica, tenemos que esperar un poco de cola. Aquí no hay que pagar por entrar. Dentro, se ve que el suelo está abombado, el techo es espectacular, de vidrio y oro.

Al salir, damos una vuelta por la plaza, vemos el café Florian y los músicos que tocan

fuera en directo.

Comemos algo de lso que lelvamos en el bolso y empezamos a callejear. Llegamos a Rialto, el puente lleno de joyerías, tiendas y puestos. Aquí compramos un vaso con fruta en un puesto de la calle. Seguimos callejeando, compramos helados (2€ - 2 bolas). Como se pone a llover, cogemos el vaporetto nº 2 hasta Lido y volvemos. Son las 18, nos vamos un rato a descansara al hotel.

A las 20, volvemos a salir. Buscamos un sitio para cenar en Cannareggio. Entramos en Pleasure café, un sitio muy pequeño, pero muy cuco.




Cenemos un antipasti de pescado, risoto y pasta y vino blanco. Total 50 €, un poco más de lo que pensábamos. El servicio está incluído, pero no el cubierto (2,5 € cada uno). Cada copa de vino nos cobra 3,5 € y el anpipasti que nos ha recomendado y no estaba en la carta, 15 €. Merece la pena, está todo muy bueno.

Nos vamos andando hasta Rialto y cogemos el vaporetto a San Marco. El ambiente por la noche está muy bien, con muchos conciertos, casi uno en cada terraza. Se nota que la marea está alta porque va saliendo el agua por la plaza, es muy curioso.

A las 23, cogemos el nº 2 hasta Marcuola y volvemos al hotel.


PLAZA SAN MARCOS

Considerada el escaparate de Venecia y de sus belle­zas arquitectónicas en todo el mundo, Plaza San Marcos es el resultado de la combinación de arte Bizantina, Gótica y Renacentista fundida en un golpe de vista espacta­cular. La Plaza como la vemos hoy es el resultado le varias intervenciones ocurridas entre el siglo IX y el siglo XIX, consecuentemente está caracterizada por la pre­sencia de zonas diferentes: además del área en frente de la basílica, la placita en frente del Palacio Ducal y el muelle que se asoma en la Dársena.

En el extremo Este de la plaza se halla la Basílica de San Marcos entre el Palacio Ducal y la Placita de los Leon­cillos. A la izquierda, en frente de la basílica, surge la Torre dell’orologio (la torre del reloj) y los porticos de las Procu­ratie Vecchie y Procuratie Nuove ocupan los lados más largos de la plaza. En las Procuratie Vecchie (construidas en el siglo XII y reconstruidas en el siglo XVI por Sansovino) vi­vían los Procuradores de San Marcos (los magistrados más importantes después del Dux) hasta que fueron trasladados a las Procuratie Nuove (en el lado opue­sto de la plaza) cuya construcción fue empezada por Scamozzi en 1582 y completada por Longhena en el siglo XVII. Están inspiradas a la Biblioteca Marciana, obra de arte de Sansovino que da a la Placita San Marcos.

Cuando, en 1808, fue derriba­da la iglesia de San Giminiano que solía hallarse en frente de la basílica, Napoleón decidió construir un edificio contiguo (el Ala Napoleónica) donde hoy se encuentra el Museo Correr. En frente de la basílica se recorta el Campanario, construido en el mismo sitio donde en el siglo IX había una torre al­barrana. El campanario fue erigido en 1514 y se derrumbó en 1902, sin hacer víctimas. En 1904 fue reconstruido idéntico al original. Desde arriba (para subir hay un práctico ascensor) podréis ad­mirar toda Venecia.

Si pensáis descansar en uno de los cafés de Plaza San Marcos, acordáos que tienen precios eleva­dos, después de todo es uno de los sitios más exclusi­vos en el mundo


LA BASILICA DE SAN MARCOS

En el lado Este de esta magnífica plaza se yergue en todo su esplendor la Basílica de San Marcos. La Capilla del dux fue construida entre 1063 y 1094 para acoger los espojos de San Marcos. Parece que los restos mortales del evangelista fueron substraídos de Alejandría (Egypto) en 828 por dos mercaderes (Rustico da Torcello y Buono da Malamocco) y como llegaron a Venecia, el año después, re­cibieron una acogida extraordinaria. Por eso el Dux en cargo, Giustiniano Partecipazio, ordenó la construcción de un templo en su honor. Sin embargo, este edificio fue completamente destruido por un ruinoso incendio en 976.

La Basílica en su forma actual (planta de cruz griega con 5 grandes cúpulas, una por cada arcada) data del siglo siguien­te. Surgió en formas bizantinas interpretadas románicamente y probablemente fue planeada por un arquitecto griego pero realizada por mano de obra veneciana o lombarda. La fachada consta de dos partes, cada una con 5 grandes arca­das. En el INTERIOR se hallan más de 4200 metros cuadrados de mosaicos realizados durante 600 años. Los más aprecia­dos son sin duda los más antiguos (se encuentran en la Capilla de Pentecostés, la primera entrando).

Aunque estén hechos en épocas di­ferentes, parece que hubiera una específica finalidad al centro de la inmensa composición: exaltar la Iglesia de Cristo. El resto de la composición está dedicada, natural­mente, a la exaltación de la iglesia veneciana y de San Marcos. El piso también merece una mirada atenta (aunque sea muy estropeado y cubierto de alfombras): es un mosaico de mármoles colorados y variegadísi­mos dibujos del siglo XII (parte de ellos fue rehecha sucesi­vamente).

El altar mayor guarda la urna de San Marcos y detrás se halla un retablo, la “Pala d’oro”, grandiosa obra de orfebre­ría bizantina en plata dorada. La imagen más venerada es sin duda la Vírgen Nicopeia (operadora de victoria), parte del botín sacado en Constantinopla en 1204 como el resto del núcleo originario del Tesoro de San Marcos que merece una visita esmerada.


EL PALACIO DUCAL

Considerado la máxima expresión del Gótico veneciano, hoy conserva completamente su aspecto original. No era sólo la recidencia del Dux, sino la sede del poder en los siglos de oro de la República Serenissima y máxima sede de la justi­cia: en el interior aún se pueden visitar los plomos (las celdas bajo los tejados de plomo donde fue encerrado Giacomo Casa­nova) y las terribles cárceles subterráneas donde los crimina­les eran encerrados y sometidos a unos atroces sufrimientos. Fundado como castillo en el siglo IX y luego destruido en la revuelta que devastó la basílica hacia el año 1000, fue recon­struido y ampliado progresivamente a medida que crecía el poder de la República, hasta alcanzar su aspecto actual entre el siglo XIV y el siglo XV. Cuando la República cayó, el Palacio fue asaltado por el pueblo que destruyó los símbolos y los adornos pero no tocó las obras de arte en las paredes. Fue convertido en la sede del gobierno de los dominadores (los Austríacos y luego los Franceses) y sucesivamente quedaron sólo el Instituto de Sciencias, Letras y Artes y la Biblioteca Marciana con el Museo Arqueológico. Las dos fachadas principales que se extienden a lo largo del Muelle y en la Placita están divididas en 3 órdenes: en la planta baja, un pórtico con columnas bajas y recias, cada una decorada con un capitel diferente; una galería abierta con arcos degenerantes que forman calados cuadrifoliados; una faja de pared llena con pocas venta­nas completamente revestida de mármoles blancos, grises y rojos en losanges. Arriba, un caracterí­stico almenaje véneto-bizantino se recorta sobre el cielo.

La fachada meridional, en el muelle, es sin duda la más anti­gua: notad el grandioso balcón en que solía asomarse el Dux reali­zado por Pier Paolo y Iacobello dalle Masegne.

La fachada oriental, sobre el canal, tiene un estilo arqui­tectónico muy diferente del resto, efectivamente data del siglo XIV. En este lado el Palacio está conectado al famosísimo Puente de los Suspiros, por donde pasaban los condenados echan­do los últimos suspiros antes de ser encerrados en las ob­scuras celdas de las cuales raramentes volvían a ver la luz. Pero la fachada más conocida es seguramente la más rica de detalles. La parte hasta la sexta columna es más antigua, mientras que el resto fue construido bajo el Dux Foscari, a finales del siglo XV. Aquí también, en el medio del lado superior, se recorta un magnífico balcón, construido en 1536 siguiendo el modelo del que se asoma en el muelle. En la corta ala que une el lado a la basílica se halla la Porta della Carta, la majestosa y riquísima entrada prin­cipal. Fue rea­lizada entre 1438 y 1442 por Giovanni y Bartolomeo Bon, que infun­dieron en ella los más extravagantes elementos del Gótico veneciano.A los lados del sencillo vano rectangular, dos ricos pináculos de yerguen hacia el cielo, y arriba un grande relieve con el León de San Marcos descansa sobre el arquitrabe.

Entrando por la Puerta de la Carta (pero la taquilla y la en­trada principal están en el lado del muelle) os encontraréis en frente de la Escalera de los Gigantes (construida según el proyecto de Antonio Rizzo) que lleva directamente a la galería del primer piso, donde se desarrolaban las ceremonias públicas más importantes, como la coronación del Dux. Desde aquí se devana el piso de las galerías, que repite el mismo esquema de las fachadas exterio­res. Para subir a los salones superio­res tomad la Escalera de Oro (proyectada por Sansovino) que lleva directamente al piso ducal, ocupado por primera vez entre 1486 y 1501 por el Dux Barbarigo que allí solía recibir los miembros de su Consejo y los embajadores extrangeros. En el Salón del Escudo se hallan las tablas geográficas de un co­smógrafo veneciano que describen el mundo conocido hasta entonces.  En el segundo piso noble hay muchísimos salones grandes y muy suntuosos, construidos señaladamente para impresionar y asombrar. Las Tablas en las paredes y en los techos fueron encargadas a los mayores maestros venecianos del siglo XVI como Tiziano, Tintoretto, Veronese y Tie­polo, cuyo deber era abrillantar el poder y los fastos de la “Serenissima”. En el techo del Salón de las Cuatro Puertas pintados con frescos por Tintoretto, Júpiter, rodeado por los dioses, otorga a Venecia el dominio sobre el Adriático y Juno le ofrece el pavo y el rayo. En el Salón del Consejo, donde se reunían el Dux, la Señoría y el Consejo de los Diez para tomar decisiones de gobierno, Veronese pintó Venecia en el trono honrada por la Justicia y la Paz. La magnificencia de las telas en las paredes del Salón del Senato es impresionante: Tintoretto pintó Venecia sentada entre los dioses mientras recibe los donos del mar. La grandeza del Salón del Mayor Consejo es asombrosa: Tintoretto, ayudado por su hijo y por Palma el Joven, realizó una desmesurada tela, tan grande como la pared, de El Paraíso.

En este salón solía reunirse el Mayor Consejo, la asamblea plenaria de Venecia que incluía más de 2000 patricios. Desde aquí un estrecho pasaje lleva a otra serie de salas dedi­cadas a la administración de la justicia, como los Salones de la “Quarantia” Civil.

De aquí los condenados, si la sentencia era negativa, pasa­ban a los plomos (las prisiones bajo el techo) o a los pozos, las celdas ciegas y secretas a nivel del agua.

El Puente de los Suspiros llevaba a las Prisiones Nuevas, con­struidas entre 1566 y 1614 en el otro lado del Rio di Palazzo.


DIA 3 – Jueves 5 de Junio – Venecia

Hoy nos levantamos un poco más tarde, está lloviendo mucho. Desayunamos tranquilamente y salimos sobre las 11, para esa hora ya sólo chispea un poco. Vamos anadando hastya Fondamenta Nova para coger el vaporetto a Burano. Tarda unos 40 minutos. Allí cogemos otro hasta Torcello. Este apsa cada media hora. De Burano a Torcello se tardan sólo 5 minutos. Al llegar a Torcello, hay un plano indicando donde se encuentra la iglesia. Hay que andar unos 10 minutos. La entrada a la iglesia cuesta 4 € y la del museo 3. Cogemos sólo la de la iglesia. Con esta entrada se puede también entrar al Museo Diocesano de Venecia, detrás del palacio ducale, pero no vamos.



Entramos a la iglesia, el suelo es de mosaico muy bonito y tiene pinturas doradas. Se ve rápido, es pequeña. Intentamos ir al campanile para subir, pero está cerrado por obras. Se pone a llover otra vez. Nos vamos a coger el vaporetto hacia Burano. Esto sí que realmente merece la pena. Es como un pueblo de cuento con todas las casas de colores, azul, verde, rosa, morado,… Además están muy bien cuidadas. Tenemos suerte y sale el sol. Comemos en el restaurante Al Vecio Pipa (Via San Mauro 397), que según pone en la entrada está recomendado por la Trotamundos. Pedimos 2 platos de pasta, uno con almejas y mejillones y el otro a la marinera. El servicio está incluido, pero el cubierto no (2 € cada uno). Pagamos 26 € en total. La pasta está buenísima, una de las mejores de todo el viaje. Un sitio muy recomendable.

Seguimos un rato más haciendo fotos y a las 16:30 cogemos el vaporetto LN hacia S. Marco. Estamos unas 2 horas callejeando y volvemos a coger el vaporetto hacia el hotel. Dejamos algunas cosas y nos vamos a tomar algo por Canareggio. Primero unos spritz (martini con prosecco – vino blanco espumoso y aperol o campari y aceituna) en una terraza Il Santo Bevitore (Cannaregio 2420/A). Nos cobran a 1,50 cada uno. Este sitio está muy bien, se ve lleno de gente de la zona, sin extranjeros. Después vamos a Ardidos Coffee en Cannaregio 2282, este es un local muy moderno, con mucha gente. Nos cobran 6 euros por 2 proseccos. Aquí, se nos acerca una mujer australiana que viaja con su hijo y estamos unas dos horas tomando con ellos, proseccos, spritz y mojitos. Volvemos al hotel cerca de la una, bastante más tarde de lo que habíamos pensado, porque mañana sale el tren a las 8, pero bueno, nos lo estabamos pasando muy bien.


BURANO
Esta isla (hace un tiempo famosa por el arte del encaje) sigue el corazón de la albufera norte y debe su increíble atractivo al color de sus casas: azul, rojo, amarillo, morado... Cada casita tiene uno diferente. Paseando por las estrechas fondamenta y calli, estaréis rodeados por una auténtica atmósfera popular: las puertas de las casas se encuentran a menudo abiertas (a demostración de que aquí todos se conocen y confían el uno en el otro), y cuando las temperaturas se hacen más templadas, plácidas viejecitas charlan serenas mientras remendan sentadas en el aire libre delante de sus casas. La producción de encajes con la aguja empezó a desarrollarse en la isla hacia el siglo XVI y encontró inmediatamente el apoyo de las damas venecianas. Sufrió luego un eclipse para ser relanzada a finales del siglo XIX cuando fueron instituidos una escuela y un taller todavía activos. Una vez bajados del vaporetto pasead sin rumbo por las estrechas fondamenta y callecitas y observad los numerosos escaparates donde podéis comprar espléndida ropa bordada por superbos encajes, pero entrad también en las pastelerías y en las panaderías: Burano es famosa también por sus galletas (“buranei”). Seguid la gente hasta la única plaza (que extrañamente es bastante compositor de Burano del siglo XVIII. Aquí se asoma la iglesia de S. Martino, la catedral de Burano, con su característica fachada sin portal (se entra por un lado) y el Museo del encaje.

TORCELLO
Esta isla solía ser un centro floreciente y fue el lugar de origen de la civilización veneciana (es aquí que se refugiaron los habitantes de Altino para escapar de las invasiónes de los Bárbaros), pero queda, de milagro, sólo el centro monumental donde se llega por una callecita en la cual se hallan sólo unos restaurantes y poquísimas casas (además del característico Puente del Diablo sin pretiles). La calle lleva a una amplia área herbosa donde se encuentran, alrededor de la “Silla de Atila” (silla de piedra probablemente utilizada por los tribunos para hacer justicia), se agrupan S. Fosca, la Catedral, el Palacio
del archivo y el Palacio del Consejo. La iglesia de S. Fosca (con su característica planta central) se destaca por la armonía de las formas interiores y esteriores, pero el monumento más importante de la isla es sin duda la catedral de S. Maria Assunta. Fundada en 639, fue reconstruida en el año 1000. El resultado es una simple iglesia de forma basilical, una fachada igualmente simple precedida por un nártex, un atrio adosado a la fachada típico de las iglesias paleocristianas. En el césped detrás de la iglesia se yergue la Capilla de San Marcos donde, según la tradición, fue colocado temporalmente el cuerpo del evangelista al final de su traslado de la Tierra Santa. En el interior, en la pared de la fachada, observad el maravilloso mosaico véneto-bizantino del Juicio Universal. En la primera faja (desde bajo hacia arriba y sin orden cronológico), se hallan los Elegidos (izquierda) y los Condenados (derecha). En el nivel siguiente se encuentran La Preparación del Juicio Universal con Escenas de la Resurrección de los Cuerpos, Cristo en Gloria con la Virgen y Santos, y Cristo Crucificado entre la Madre y S. Juan.



DIA 4 – Viernes 6 de Junio – Florencia

Nos levantamos a las 6:30, hacemos la maleta, desayunamos y vamos andando a la estación de tren. Está nublado, pero no llueve. Validamos el billete en las máquinas amarillas.



A las 8:45 sale el nuestro. Es el que va a Roma, pasa por Mestre, Padua y Bolonia, antes de llegar a Florencia. Llegamos a las 11:30 a la estación de Santa María Novella. En 10 minutos andando llegamos al hotel Cellai en Via XVII Aprile.

http://www.florence-tourism.com/web/site/esp/30/hotel_cellai.html

La recepcionista nos dice que ha habido un problema en la habitación y que si no nos importa, nos llevan la primera noche a otro hotel que está en la misma calle y es de categoría superior. Como no podemos hacer otra cosa, accedemos. El hotel es el Carolus de 4* y está bastante bien. Dejamos las maletas y nos vamos hacia la plaza del Duomo, llegamos en poco más de 5 minutos, pasamos por delante de la Academia, así ya la tenemos localizada para el día que tenemos que ir. La sensación que se tiene al llegar a la catedral es bastante indescriptible. Es grandiosa, y los colores verde y blanco la hacen completamente diferente a cualquier otra iglesia que haya visto antes. La plaza no es muy grande, así que da la sensación de llenarlo todo. Enfrente de la catedral con el campanile, está el baptisterio. Entramos en la catedral (no hay que pagar) y vemos la cúpula desde abajo. Salimos para ir a las taquillas para subir a la cúpula. Hay que pagar 6 euros.



Son 463 escalones, los primeros muy fáciles, pero se van acaracolando y estrechando a medida que se sube. Primero se pasa por dentro de la cúpula para ver las pinturas de cerca, realmente increible. Se sube un poco más y se sale al exterior, para ver todo Florencia desde arriba. Es precioso. Aquí estamos un buen rato haciendo fotos y sobres las 15, bajamos y buscamos un sitio para comer. Vamos a uno muy cerca de la plaza, Lo Scudo en Via Dell’Orivolo 53. Tomamos un plato de pasta cada uno, muy bueno, 20.90€.



De aquí, vamos a la plaza S. Lorenzo, vemos la basílica de San Lorenzo por fuera y un poco del mercado.

Hoy hemos dormido muy poco, así que estamos muy cansados. A las 17 nos vamos un rato a descansar al hotel. A las 18:30 ibamso a salir, pero empieza una tormenta, así que esperamos. A las 19:30 parece que va lloviendo menos y nos vamos a la Plaza de la Signoria. Ahí está el Palazzo Vecchio, la réplica del David y un montón de estatuas más. Es un museo al aire libre. Aquí está también la Galería de los Ufficci, a la que tenemso que venir mañana.

A pesar de que lleuve, también hay algunos rayos de sol, el arco iris y una luz muy bonita sobre lso edificios.

De aquí vamos al puente Vecchio que está iluminado. Lo cruzamos, llegando a Oltrano,  damos una pequeña vuelta y volvemos a cruzar. Antes de volver al hotel nos comemos un kebap con una coca-cola pro 5€ cada uno. Sobre las 23 llegamos al hotel


FLORENCIA , capital de la Región Tuscania, tiene casi medio milion de abitantes, extendido en las orillas del Arno, entre los Mares Adriático y Tirrenop, casi en el centro de la península italiana. Es una ciudad con larga tradiciàon de industria y artesanía, comercio y cultura, arte y ciencia. Estando en las líneas ferroviarias nacionales principales, es fácilmente accesible de la mayoría de los lugares de Italia y del exterior. El aeropuerto de Florencia "Vespucci", en donde las líneas aéreas nacionales e internacionales paran, está situado 5 kilómetros del centro de ciudad. La autopista principal, A1, conecta Florencia con Bolonia y Milano en el norte y Roma y Nápoles en el sur. La autopista A11 para el mar la junta a Prato, a Pistóia, a Montecatini, a Lucca, a Pisa y a todos los lugares del mar Tirreno. Hay también la autopista que conecta Florencia con Siena y Grosseto. El clima es templado pero variable, con inviernos ventosos y los veranos calientes.

La CATHEDRAL ("Duomo") es dedicada a Santa María del Fiore y es una construcción típica del arquitectura gótica italiana. El actual edificio fue diseñado por Arnolfo di Cambio (1245-1302), uno de los arquitecto-escultores más grandes de su edad. Acabado entorno al 1367, fue cubierto totalmente con mármoles coloreados como el anterior Baptisterio, aunque la fachada, inacabada, fue cubierta solo en el siglo diecinueve.

Dentro están varias obras de arte importantes, resaltan las formas góticas tensas de la arquitectura, totalmente diferentes del los edificios medieval del norte de las Alpes. De importancia primaria son los dos frescos en la pared derecha que muestran los monumentos ecuestres del "condottieri" (los generales) por Paolo Uccello (1436) y Andrea del Castagno (1456).

Muchas de las esculturas del Duomo ahora están en el museo de la "Opera del Duomo" pero otras todavía están en su sitio, tal como las lunetas de Luca della Robbia sobre las puertas de la Sacristía o la puerta de bronce de la Sacristía de Misa y la fabulosa Pietà de Michelangelo. No se debe olvidar ver las espléndidas ventanas de cristal manchadas, realizadas principalmente a partir del 1434-1445 por los diseños de artistas importantes tales como Donatello, Andrea del Castagno y Paolo Uccello. También se debe notar las taraceas de madera de los armarios de la Sacristía por los diseños de Brunelleschi, Antonio Del Pollaiolo y otros.

LA "CUPOLA"

Filippo Brunelleschi empezó en el 1420 la construcción de la CUPOLA. El diametro interno (m. 41,50) está cerca del límite máximo para cualquier tipo de bóveda en albañilería. En vez de recuperar técnicas yá utilizada, Brunelleschi inventó una técnica basada en sus conocimientos de la "manera de construir" de los Romanos que él puso al servicio de un nuevo concepto y consideró otros problemas técnicos, culturales y estéticos, en la realización de la cúpula. La construcción de la bóveda dependió básicamente del uso de una técnica de construcción capaz de evitar cualquiera discontinuidad peligrosa en la albañilería (27.000 toneladas). La cúpula fue construida así como si fuera una construcción autosuficiente. La bóveda es asombrosamente moderna: en esta doble concha, la cúpula exterior más ligera protege la cúpula interna contra los elementos, mientras los dos trabajos estan junto gracias a las costillas que las conectan. Terminado en 1436, la cúpula es el mayor elemento del horizonte florentino, símbolo de una gran tradición cultural y del conocimiento cívico de la ciudad. El interior de la cúpula ha sido adornado por Giorgio Vasari (1511-1574) y Federico Zuccari (c. 1540-1609) con un fresco enorme que representa el Juicio Universal.

EL "CAMPANILE DI GIOTTO"

El "Cupolone" o la bóveda enorme sigue siendo, con la torre-campana de la catedral, conocida como el "CAMPANILE DI GIOTTO", el attracción que más llama a los turistas. Giotto, el famoso pintor y arquitecto diseñó la torre, aunque en su muerte en 1337 solamente la parte más baja era completa. El trabajo fue continuado debajo de Andrea Pisano (c. 1290-1349) y Francesco Talenti (activo 1325-1369) que terminó la estructura repetiendo la decoración del mármol mitigado por las ventanas.

BASILICA DE SAN LORENZO - Consegrada por San Ambrosio en 393, es la iglesia más vieja de la ciudad. Fue reconstruida a lo largo de las líneas Romana en 1060. El edificio como es ahora remonta al 1423 y fue diseñado y construido por Brunelleschi. En la reconstrucción de la basilica, Brunelleschi propuso su nuevo tipo de iglesia, en estilo clasico, inundado con luz para distinguir una claridad arquitectónica (y no místicamente en media luz como en precedencia), absolutamente regular y simétrica en sus corrispondencias, en una orquestación continua. Dentro hay trabajos del Rosso Fiorentino, Desiderio da Settignano, Donatello y Bronzino. La iglesia es flanqueada por la esplendida Sacristía vieja echa por Brunelleschi y la nueva de Michelangelo, que huespeda las tumbas de la familia Medici, llamada Capilla de los Medici. A la izquierda de la iglesia hay la libreria Laurenciana, también diseñada por Michelangelo, por orden de la familia Medici, que quería un lugar donde conservar sus preciadas collecciones de libros, papiros y manuscritos. No lejo de San Lorenzo está el Mercado central, construido con vitro y acero, un ejemplo esplendido de arquitectura del tardo siglo 19.

DIA 5 – Sábado 7 de Junio – Florencia

Nos levantamos a las 8:30. El desayuno está muy bien. Buffet con todo tipo de cosas. Hacemos las maletas y las dejamos en recepción para que las lleven al hotel Cellai. Nos pasamos por este, por si hay algún problema y nos vamos a la galería de los Ufficci, tenemos reserva a las 11:15.


En la puerta 2, que es la entrada principal, hay muchísima gente. Enfrente, está la puerta 3, para coger la entrada si tienes reserva. Nos cobran 10,50 a cada uno, 4 euros más que la entrada normal, pero realmente merece la pena pagarlo porque en la cola igual hay para 2 horas. Cuando se hace la reserva por teléfono no tienes que pagar nada. Nosotros enviamos un email al hotel y ellos llamaron para la reserva. Después hay que ir a la puerta 1, que es la entrada para grupos, pero no hay que esperar cola. Dentro, no se pueden sacar fotos. En teoría, tampoco se puede meter agua, pero pasamos el bolso por el torno y no nos dicen nada. Dentro del museo, estamos unas dos horas y cuarto. La sala que más nos gusta es la 42 – Niobe, no sólo por las esculturas, sino por la sala en sí, con el techo con relieves dorados. El resto está bien, pero pensaba que iba a ser más grande. Subimos a la terraza a hacer unas fotos de las vistas, se ve la parte de arriba del palacio vechio.

De aquí, vamos otra vez a la plaza de la signoria y al palacio vechio. Sobre las 14 nos vamos a la Santa Croce. La plaza no la podemos ver bien porque están montando los andamios para los asientos para el palio histórico, que es este mes. Nos sentamos un rato en las escaleras de la basílica y comemos algo de lo que llevamos en el bolso.

Pasamos por la biblioteca nacional y cruzamos el puente alla grazie. Desde aquí, se ve perfectamente el puente vecchio. Nos compramos un helado y nos cobran 5 €. Muy bueno, pero un poco caro. Vamos al palazzo pitti y subimos hasta los jardines de boboli. Hay que pagar 10 €, así que pasamos de pagar eso pro entrar a un parque. Justo enfrente, está la parada del bus 12 y lo cogemos para subir a San Miniato al monte. Subimos sin pagar, ya que justo llega y no vemos ningún quiosco donde comprar billetes. San Miniato es una iglesia pequeña,  pero impresionante. Aquí no se paga entrada, merece mucho la pena entrar a verla. Mientras estamos dentro, empieza una tormenta, así que estamos un buen rato dentro, esperando a que pare. Sobre las 18, salimos ya bajamos a la Piazale Michelangelo. Desde aquí, se ve todo Florencia. Hacemos unas fotos y bajamos. Volvemos a cruzar por el puente Alla Grazie hacia la zona de los Ufficci. Entramos en Moyo, un bar que está en Via del Benci 23R. Es un garito muy moderno en el que tomamos un aperitivo (buffet entre las 18-19 y las 22) por 6 euros cada uno. Pagas la bebida y comes todo lo que quieras. La verdad que está genial, es una forma perfecta de cenar. Mientras estamos ahí, se pone otra vez a llover. Pasamos por la iglesia de S.M.Ricci y vemos que a las 21 va a haber un concierto de música sacra. Tomamos un café en un sitio de al lado, y volvemos para escuchar el concierto. Es un coro de chicos y chicas americanos que cantan increíblemente bien y con la acústica de la iglesia, ponen la piel de gallina.

Cuando acaba el concierto, nos vamos al hotel Cellai. Nos dan una habitación superior, por las molestias causadas. Es bastante grande, con una cama enorme con dosel. Nos han dejado también una botella de vino blanco. Un detalle, por su parte.


PALAZZO VECCHIO (el palacio viejo) es el más importante edificio civil en la ciudad de Florencia. La construcción, planeada por Arnolfo di Cambio, empezó en 1299. Inicialmente fue la sede de los Priores del Arte y de la Signoria. Fue temporalmente casa de la familia Granducale debajo de Cosimo I de' Medici antes su transferencia a Palazzo Pitti. Fue en este período (1550-65) que Vasari lo transformó, decoró suntuosamente los interiores reconstruidos así que pudiera divenir la sede del gobierno y la residencia oficial de la familia dominante. El palacio entero es un museo, especialmente los "cuartos monumentales". Merece ver "el Salone dei Cinquecento, el estudio de Francesco I de' Medici, el cuarto de los elementos y el Pasillo de los lirios. La Loggia dei Lanzi, mira por alto la grande Plaza de la Signoria en frente del palacio; hay varias estatuas importantes, incluido el "Perseo" del Cellini y el "Rapto de las Sabinas" por Giambologna.

La Iglesia de Santa Croce y la plaza

Visite la plaza de Santa Croce, y camine al Palazzo Medici Riccardi. Echa una mirada al palacio de Michelozzo construido para Cosimo de' Medici, que fijó el estilo para todos los palacios del Renacimiento. Visite los frescos de Gozzoli del patio y de la visión en la Capilla dei Magi, no olvidándose del exterior del edificio visible de las calles estrechas. Visite los laboratorios históricos de Florencia, para ver cómo las mismas artesanías del renacimiento todavía se practican hoy: cerámica, mosaicos, cuero y perfume.

Palacio Pitti fue construido en la mitad del '400 por Luca Fancelli, sobre requesta de Luca Pitti, que quería ostentar su poder en frente de la Familia Medici, construyendo una residencia grandiosa.
Caída en desgracia la Familia Pitti, el palacio fue comprado en el 1549 por Cosimo I de' Medici, que lo transformò en la residencia de familia.
El Palacio fue ampliado con los proyectos de Bartolomeo Ammannati, y solo en el '600 llegó a la forma actual.

El Palacio surge sobre una grande Plaza semicircular. Es la sede de unos de los más importantes Museos de Florencia: la Galeria Palatina (con obras de arte de Raffaello, Andrea del Sarto, Caravaggio, Bronzino y otros maestros), el Museo de las Platas, la Galeria de Arte Moderna y la Galeria del Costumbre.

Palazzo Pitti es famoso también por los jardines que lo circundan: los jardines de Boboli, realizados en el 1549 por Ammannati y, luego, por Buontalenti, sobre requesta de Cosimo I.

La iglesia de SAN MINIATO AL MONTE es uno de los ejemplos más maravillosos del arquitectura Romanica de la Tuscania, construida entre el siglo 11y el 13. La fachada típica en mármol blanco y verde es adornada por una bella arcada y tiene un mosaico del siglo 12 sobre Cristo entre la Madonna y San Miniato. En el interior, el altar preserva los huesos de San Miniato. El presbiterio levantado es de gran belleza con su púlpito y su coro de madera taraceado. La Sacristía tiene frescos echos por Spinello Aretino sobre las dieciséis historias de la leyenda de San Benedicto. La capilla de San Jaume, o "Cardenal de Portugal" es adornada por cinco redondeos espléndidos de Luca della Robbia. La capilla del Crucifijo fue diseñada por Michelozzo y adornada por Luca della Robbia. A la derecha de la iglesia hay el Palacio del obispo, residencia antigua del verano de los obispos de Florencia que entonces hicieron un convento, un hospital y una casa de Jesuitas. De allí hay un panórama agradable sobre la ciudad. La iglesia está en primer plano en la película de suspense "obsesión" de Brian de Palma (1976, con Geneviève Bujold y Cliff Robertson).


La GALERÍA UFFIZI es uno de los museos más famosos de Italia y del mundo. El Uffizi fue pensado para contener las oficinas de la famosa familia de Medici (Uffizi = oficinas). Pero, desde el principio, los Medici pusieron unos cuartos a un lado para contener los trabajos más finos de sus colecciones.
El Uffizi contiene hoy obras maestras por artistas italianos y extranjeros del siglo décimotercero y décimo octavo, tal como Cimabue, Giotto, Masaccio, Beato Angelico, Leonardo da Vinci, Botticelli, Michelangelo, Piero della Francesca, Raphael, Caravaggio, along with Rubens, Rembrandt, Dürer, Goya y muchos otros.
El Pasillo Vasariano que conecta la galería de Uffizi con los anfitriones del palacio Pitti contiene una colección rica de retratos de artistas del pasado y del presente. Construido por Vasari en 1565, pasa sobre el Ponte Vecchio, el "Puente Viejo" (el puente más viejo de la ciudad), con sus muchas joyerías.

DIA 6 – Domingo 8 de Junio – Florencia

El desayuno del Cellai es un poco más pobre que el de ayer, pero no está mal. A las 10:30 tenemos la reserva para la Academia. Nos cuesta 10,50, 4 euros más que sin reserva (igual que ayer). Aquí, también merece la pena pagar el suplemento  para no hacer la cola, porque hay muchísima gente.



Primero hay una sala con pinturas y una escultura (el rapto de Polisena), que es el modelo en yeso del original que está en la plaza de la signoria. Después se entra en la sala donde está el David. Impresiona verlo, ahí de repente. El nivel de detalle es alucinante. Tiene 516 cm de alto. Nos tiramos un buen rato ahí mirándolo, te deja como alelado.

Después hay una sala con esculturas que son modelos de otras que se encuentran en diferentes ciudades del mundo y otras salas más con pinturas. Más o menos en una hora, lo hemos visto todo.

De aquí vamos a la plaza de la Annunziata, que está pegada a la academia. Entramos en la basílica (gratis) y es realmente increíble. Es una de las más bonitas. Como están en misa, esperamos un poco y al acabar, la visitamos tranquilamente. Merece mucho la pena entrar aquí.

Nos vamos a la Plaza Santa María Novella. Están restaurándola, así que está vallada. Vamos a la basílica y la vemos por fuera. También es blanca y verde. Esta cuesta 2,5 € entrar, pero pasamos.

Muy cerca, en el número 16 de Via Della Scalla, está la farmacia Santa María Novella, que es la más antigua del mundo. Nos os la perdáis, es uno de los sitios que más nos gusta de todo Florencia. Huele a esencias y tiene música clásica, es como un museo.

Cuando salimos son las 14:30  y vamos a comer enfrente de la farmacia, en el restaurante La Cantinetta, verduras y queso al grill y lasaña. Está bien, aunque la clavadita de 5 € por una copa de vino, nos parece exagerada. Total 24,5 los 2.



De camino a la plaza de la República, nos encontramos con el palacio Strazzi, dentro tiene como un patio con 3 salidas diferentes, una cafetería y una lámpara gigante de cristales y metal. Vamos un rato a la plaza de la república, aquí hay muchas terrazas, un carrusel y muchas tiendas, entre ellas Zara. Estamos un rato sentados viendo pasar a la gente.

De aquí, vamos otra vez a la plaza de la Signoria. Unas fotos, una helado, un machiato y a las 17 toca la tormenta del día. Aprovechando la lluvia, nos vamos un rato a descansar al hotel, dejamos algunas cosas, nos cambiamos y a las 19 volvemos a salir, sigue lloviendo, pero algo menos. Vamos a la zona de la Santa Croce y tomamos en aperitivo en Oibó, en Borgo de Greci 1. Son 8 euros cada uno, hay muchas cosas, macarrones, ensaladas, canapés, jamón, patatas, etc. Recomendable también.


Sobre las 23, volvemos al hotel.
La Galería de la academia es uno de los museos más conocido en Florencia, porque huespeda esculturas famosas de Michelangelo, incluido el "David", "Los cuatro prisioneros" y la "Pieta de Palestina". Hay también unas pinturas de la colección del Granduque Pietro Leopoldo que ayudaba a los jóvenes artistas florentinos, estudiantes de la Academia del Arte.


DIA 7 – Lunes 9 de Junio – Toscana

Nos levantamos a las 9, desayunamos, hacemos las maletas, las dejamos en recepción  y nos vamos a Europcar a por el coche de alquiler. Nos dan un fiat Bravo gris oscuro, muy nuevo, está genial. Metemos en el GPS la dirección del hotel y vamos a recoger las maletas. Partimos rumbo a Loro Ciuffenna, en la provincia de Arezzo, en la Toscana. Está a 54km de Florencia. He sacado todas las rutas con Vía Michelín, pero nos guiamos con el GPS y llegamos al pueblo sin ningún problema. Justo cuando estamos casi llegando, se pone a llover, pero enseguida para. Vamos por la autopista A1, salida Valdarno, peaje 2 €. En el pueblo preguntamos por el hotel Villa Belpoggio, que no está en el pueblo, sino en el campo. Es un sitio precioso, tenemos un apartamento enorme con cocina-comedor, una habitación muy grande y baño. Es perfecto, la casa es preciosa, entre montes verdes.

Strada Provinciale Setteponti 40/A - 52024 Loro Ciuffenna
http://es.venere.com/apartamentos_de_lujo_loro_ciuffenna/apartamento_de_lujo_relais_villa_belpoggio_residenza_d_epoca.html



Deshacemos las maletas, que ya teníamos ganas, y nos vamos a la piscina. Hoy nos toca día de descanso, después de las palizas de Venecia y Florencia y las que nos esperan esta semana. aquí vamos a estar 7 noches.
A las 16:30 se pone a llover otra vez, así que se acaba la piscina. Nos vamos al pueblo a comprar algunas cosas para cenar y picar. No tenemos el desayuno incluido, y Paola (la chica que lleva el hotel) nos dice que nos invita al del día siguiente. El resto de días, le diremos que nos lo incluya, son 8 €, pero seguro que está muy bien.
Volvemos al hotel con las compras, picamos algo, damos una vuelta para hacer unas fotos y preparamos la cena. Un final tranquilo, para un día muy tranquilo.

DIA 8 – Martes 10 de Junio – Toscana (Pisa-Lucca-Pistoia)

Nos levantamos sobre las 9. Es desayuno está muy bien, bollos, tomamte, jamón, yogures, zumo, tortilla, queso,… Sobre las 10:15 salimos con dirección a Pisa. Hay unos 135 km y 2,8 € de peaje. A las 12 llegamos. Hay zonas de OTA a 0.5 € la hora, pero pasamos al lado del estadio de fútbol y ahí no hay que pagar, así que aparcamos. En 10 minutos llegamos a la plaza dei Miracoli. La torre está más inclinada de lo que me la imaginaba. Todo el conjunto es magnífico, torre, catedral y baptisterio. Hay muchísima gente, la mayoría haciendo la típica pose de sujetar la torre. Sacamos entradas para la catedral (2€), es muy bonita por dentro. Merece la pena entrar. Subir a la torre cuesta € y el baptisterio 5, pero de esto, pasamos.



Damos una vuelta por los alrededores, pasamos por la facultad de medicina y llegamos al río Arno. Se ve una ciudad tranquila, pero con el típico ambiente de estudiantes. Sobre las 15 nos vamos hacia el coche, entramos primero en un ciber, nos comemos los sandwiches y la fruta que hemos llevado y seguimos rumbo a Lucca. Son unos 35 km y 0,90  de peaje. En Lucca, alrededor de la muralla pone que sólo se puede aparcar 2 horas, buscamos un sitio al lado y lo dejamos en un parking de superficie (no de pago). Entramos por la puerta Elisa y subimos a la muralla. Hay mucha gente paseando y otros andando en bici. Se está muy bien, porque los árboles dan mucha sombra. Andamos un rato, y cuando vemos la catedral, bajamos de la muralla. Entramos en la catedral (no hay que pagar). Están restaurándola y se ve que algunas pinturas del techo están muy estropeadas. Callejeamos un rato, es un pueblo precioso. Vamos a la torre guinigui, que tiene árboles en la parte de arriba y subimos (3.5 €). Son 250 escalones, pero se suben muy bien. Las vistas desde arriba son geniales. Merece la pena subir.



En Lucca estamos casi 3 horas.

Nos vamos a Pistoia, a unos 50 km. Cuando llegamos son casi las 20. Este pueblo, nos decepciona un poco. Tiene la catedral, baptisterio y campanile, que al anochecer lo iluminan y queda precioso. Lo que vemos del resto nos parece que no merece mucho la pena. Nos sentamos en una terraza a tomar una cerveza y nos sacan algo para picar. Volvemos al hotel por la autopista (89 km – 3.8 €).

Si tuviera que repetir el día de hoy, eliminaría la visita a Pistoia y me quedaría más tiempo por Lucca.


DIA 9 – Miércoles 11 de Junio – Toscana (Volterra-San Giminiano)

Nos levantamos a las 9. Hoy habíamos pensado hacer la ruta del Chianti, pero como está un poco nublado, cambiamos a Volterra y San Giminiano. A las 10:15 salimos para Volterra, 2.8€ de peaje. Llegamos sobre las 12, aparcamos debajo de la muralla (sin pagar) y subimos. No se puede entrar con el coche. Vemos alguna iglesia y llegamos a la catedral, pero está cerrada, ya que cierra de 12:30 a 15:00. Entramos en el baptisterio (gratis) y callejeamos. Es un pueblo medieval precioso, el más alto de la Toscana. De camino, hemos parado por la carretera a hacer la típica foto de paisaje toscazo. Se echa de menos algún mirador para poder parar, ya que casi no se puede parar en ningún sitio por el camino.


Seguimos callejeando, vemos el teatro romano y nos vamos al coche. Comemos un par de sándwiches y a las 15 nos vamos hacia San Giminiano. El paisaje del camino es precioso, sólo haría falta un cielo un poco más azul. En San Giminiano, dejamos el coche en un parking de pago. Aquí parece que no hay muchas más opciones (2€ la hora). Nos vamos a la plaza de la cisterna a tomar una coca-cola en el restaurante La Cisterna, en la terraza, 3.5€ cada una.



Damos una vuelta por el pueblo. Miramos para subir a la torre Guelfa, pero la entrada (5€) incluye la torre y dos museos y sólo queda 1 hora para cerrar, así que pasamos. Vamos por la muralla y por más calles, volvemos a la plaza de la cisterna y nos compramos un helado en una heladería que tiene premios (la que tiene terraza no, la otra). Nos sentamos en las escaleras de en medio de la plaza y cuando acabamos vamos a por el coche (3 horas, 6€).




Vuelta a Loro Ciuffenna por la autopista (2,2 €). Llegamos sobre las 20:30. Unas cuantas fotos más, descansar y prepararnos la cena.

DIA 10 – Jueves 12 de Junio – Toscana (Ruta Chianti: De Greve in Chianti a Siena por la S222 pasando por Monteriggioni y Siena)

Nos levantamos sobre las 9. Hoy también está un poco nublado, pero vamos a hacer la ruta del Chianti. Esa ruta es la carretera S222 que une Florencia con Siena. Nosotros la cogemos desde Greve in Chianti, para no ir hasta Florencia. Del hotel a Greve, tenemos algo más de 30 km. El paisaje es precioso, vamos parando a hacer fotos en sitios de la carretera, donde se puede.

Nos desviamos un poco y vamos a visitar Monteriggione, un pequeñísimo pueblo medieval rodeado por una muralla. Dejamos el coche abajo (gratis) y subimos por unas escaleras. Estamos una media hora, tiempo más que suficiente para ver el pueblo entero. Nos vamos al coche y se pone a llover bastante fuerte. Comemos unos sándwiches y nos vamos a Siena (20km). Damos unas cuantas vueltas para localizar un sitio para aparcar y encontramos un parking libre por la zona del estadio. Como sigue sin parar de llover, nos quedamos un rato en el coche esperando. Cuando parece que llueve menos, cogemos jersey, paraguas y chubasquero y salimos. Son las 16:30. Nos mojamos bastante hasta que llegamos al duomo. Es muy bonita por fuera. Entramos (3€) y por dentro es impresionante, la mejor de las que hemos visto hasta ahora. Se pueden sacar fotos (sin flash) y video. Tiene una cúpula enorme, azul oscuro con estrellas doradas.




Salimos y vamos a la plaza del campo, donde se celebra el palio. Tiene terrazas alrededor y está torcida (el suelo está inclinado), es muy original. Nos hubiera gustado subir a la torre (más de 500 escalones) para contemplar las vistas, pero como está lloviendo, no merece la pena. Callejeamos un poco y buscamos un sitio para cenar. Terminamos en uno recomendado en el foro, es la pizzería Il Nonno mede, en camporegio 21 (tel 0577/247966). A la salida del centro histórico hay un MacDonald's. Al lado unas escaleras que bajan. Bajar las escaleras, seguir un poco y meterse a la izquierda al fondo.Es muy bonito, se come muy bien y no es caro, y se disfruta de unas vistas de Siena maravillosas. Hubieramos entrado dentro porque en la terraza hace un poco de frío, pero nos dicen que dentro es sólo para reservas.Tomamos pasta y pizza, buenísimo 20€ los 2.


Vamos hasta el coche. De vuelta hay 60 km, pero el GPS nos la lía y nos mete en el parque natural valle del infierno, por unos caminos sin asfaltar, estrechos, pendientes fuertes, niebla, bosque por todos lados. Para esta hora es ya noche cerrada y asusta un poco. Después de un buen rato, encontramos un restaurante y entramos a preguntar. Una chica muy amable, coge su coche y nos dice que la sigamos para sacarnos de ahí. Menos mal, porque no parecía fácil sin ayuda.

DIA 11 – Viernes 13 de Junio – Toscana (Cortona y Arezzo)

Nos levantamos sobre las 9. Hoy en el desayuno, tenemos pizza y tortilla de patata. La verdad que se lo curran con los desayunos, cada día hay algo diferente. Sobre las 10:30 salimos para Cortona. Primero paramos a echar gasolina. 73€, llenarlo, está a 1,50, bastante más cara que en España (1,20). Cogemos la autopista (2,70). En Cortona hay zonas de parking con OTA y otras gratis. Encontramos sitio en al zona gratis que está justo enfrente de la de pago y lo dejamos ahí. Casi no tenemos que subir nada para llegar al pueblo. Entramos sólo en una iglesia, S. Francesco, el resto de sitios están cerrados. El pueblo es el típico medieval con la muralla y calles muy empinadas. Subimos hasta arriba del todo, donde está el santuario de S. Marcerita. Bajamos por el otro lado, que está marcado para rezar el rosario. Damos otra vuelta por el pueblo, entramos en una tienda a comprar jabones de aceite de oliva, y nos vamos a la piazza F. Mitterand, que es un parque, a comer unos sándwiches. Son las 15, hemos estado aquí unas 3 horas.

Nos vamos hacia Arezzo, a unos 28 km. Esta es la ciudad donde se rodó la película La vida es bella. Por el camino, empieza a llover, así que al llegar toca sacar jerseys, chubasquero y paraguas. Dejamos el coche en un parking enorme que hay debajo de las murallas, en la puerta S.Biaggio. No hay que pagar y está al lado de unas escaleras mecánicas que te suben a la parte vieja. Entramos en el duomo (gratis) y vamos a la piazza grande, que es lo más famoso de Arezzo. Aquí, el 21 de julio también celebran el palio, así que están preparando la plaza, poniendo gradas y arreglando el suelo. Está todo lleno de andamios y excavadoras, pero bueno, hacemos algunas fotos.

Entramos a tomar un café en el Caffe Antico Teatro (capuchino 1,20 – expresso 0,85). Nos sentamos en una mesa dentro. Pensábamos que nos cobrarían como en la terraza, pero no. Es un sitio muy bonito y el café está buenísimo.



Atravesamos la calle Corso Italia, que es la principal y está llena de tiendas caras. Llegamos hasta el anfiteatro romano (son 4 piedras, no vale la pena). Seguimos callejeando. A las 18 hay partido de la eurocopa de Italia con Rumania (creo que se juegan el pase a la siguiente fase), así que desaparece la gente de la calle. Sobre las 20:30 nos vamos hacia el hotel, de camino se pone a llover torrencialmente, así que, poco más podemos hacer hoy.

DIA 12 – Sábado 14 de Junio – Toscana (Ruta de las abadías: Abbazia di Monte Olivito Maggiore, Montalcino, Abazzia Sant’ Antimo, Pienza, Montepulciano)

Hoy vamos a hacer la ruta de las abadías. Empezamos por Abazzia di Monte Olivito, a unos 90 km del hotel y 2,70 € de peaje. Por el camino, vamos parando a hacer fotos. Es el típico paisaje toscazo, con amapolas, cipreses y rulos de paja. De vez en cuando, llueve un poco. Cuando llegamos a la abadía son las 13 y está cerrada de 12 a 15:15, así que sólo la vemos por fuera.

De aquí, nos vamos a Montalcino, a unos 20km. Aparcamos fuera, sin pagar. Montalcino, es otro pueblo medieval con castillo y con muchas bodegas. Hay bares por todas partes, incluso en palacios y fortalezas. Vemos una boda. La novia va de blanco, pero lleva los brazos llenos de tatuajes y rastas. Es un poco extraño. Nos tomamos un vino blanco en la plaza garibaldi, en la vinería Le potazzine. 4.5 € cada uno.



Damos una vuelta por el pueblo y sobre las 15:30 nos vamos a la Abazzia de Sant’ Antima, que está al lado. El paisaje es espectacular, lleno de viñedos y la adabía es preciosa (más por fuera que por dentro). Está también cierra de 12 a 15.

Comemos un sándwich y seguimos hacia Pienza. Se pone a llover. Aparcamos cerca de la muralla, sin pagar. Tomamos un café en el bar Il Casello, con unas vistas espectaculares en la terraza. Dos cafés 1.7€.



Está claro, que hay sitios donde toman el pelo a la gente con los precios y otros en cambio, no. Este pueblo es muy bonito y las vistas de la Toscana, de las mejores. Aquí, hay muchas tiendas en las que venden queso. Las calles tienen nombres como “calle de amor”, “calle del beso”.

Sobres las 19:30 nos vamos para Montepulciano, a unos 20km. Aparcamos abajo (gratis) y subimos un poquito hasta la muralla. Como son ya las 20, no hay casi nadie. Este pueblo también tiene muy buenas vistas. Damos una vuelta y entramos a cenar en la Hostería del Borgo di Bifolchi Nadia en Via Ricci 7. Tiene una terraza con vistas muy bonita, pero está todo mojado y hace frío (unos 16-17 grados), así que cenamos dentro. Pedimos carpaccio di biesaola con rucola y parmigiano, ribollita (pan debajo y verduras encima) y canelones, una copa de vino, agua y un café. Total, 27€. Está muy bien.



De aquí, autopista dirección Florencia (70km,  2.7€) y al hotel.

Recomendable 100% esta ruta, sobre todo por los paisajes que se ven de campos curvados, amapolas,…



DIA 13 – Domingo 15 de Junio – Toscana

Hoy nos levantamos un poco más tarde, desayunamos tranquilamente y nos quedamos en la piscina del hotel. Hace un día muy bueno. Sobre las 15, bajamos al pueblo a comer en una rosticería. Es un local donde tienen comida preparada para llevar o para comer allí. Tomamos pastel de verduras, calabacín relleno, sepia y cerdo al horno. Agua, vino y café 25€. Nos trae con la cuenta, una crema de limonchelo buenísima.



Volvemos para el hotel sobre las 16, pero ya se ha nublado, así que no hay más piscina. Siesta, y a preparar la maleta, que mañana nos vamos para cinqueterre.

Nos preparamos y sobre las 19, nos vamos para Loro Ciuffenna, que llevamos aquí una semana y todavía no conocemos el pueblo. Damos una vuelta, tomamos una cerveza (4€ las dos, en una terraza) y buscamos un sitio para cenar. Al final, en una terraza en la plaza del pueblo. Ensalada de tomate y mozzarella, pizza, cerveza, vino, café, limonchelo y grapa. Invitamos a una grapa a la camarera, que es cubana y ha sido muy simpática. Se sienta con nosotros un rato. Total 20€ todo. Tienen muy buen rollo en el bar. Hay una señora, Anna, que va con una pamela fucsia, nos dice la camarera que está loca, pero en plan bien. Se conocen los de todas las mesas y se divierten mucho.


DIA 14 – Lunes 16 de Junio – Cinqueterre

Nos levantamos un poco antes, desayuno y terminar las maletas. A las 10:20 salimos para Vezzano Ligure (La Spezia). Hay 197 km, todo autopista. Según el GPS y lo que llevo en Vía Michelín, hay que salirse en Viaggerio, pero está mal, ya que tomamos esa salida y tenemos que volver a entrar en la autopista y seguir hasta La Spezia. De ahí, seguimos hasta Vezzano Ligure y enseguida encontramos el hotel Al Convento. La habitación es muy mona, con detalles marineros. El baño un poco pequeño, pero bien.

Piazza Regina Margherita 1 - Vezzano Basso - 19020 Vezzano Ligure (La Spezia)




Dejamos las maletas y, sobre las 13 nos vamos. Le preguntamos a la chica de recepción, y nos dice que para cinqueterre, lo mejor es ir hasta La Spezia y ahí coger el tren. Eso lo haremos mañana. Le preguntamos también por alguna playa para ir hoy y nos recomienda, Lerici. Nos vamos hacia allí, es un pueblo a unos 10 km. Hay que dejar el coche en un parking fuera del pueblo (ponemos 4.5€ por 3 horas; hay tarifa de día entero 9€) y andando unos 10 minutos, se llega a la playa. Al pueblo no se puede entrar con el coche. Nos quedamos una media, ya que se pone a llover un poco y se levanta viento. Caminamos un poco más y llegamos al pueblo. Damos una vuelta por el paseo marítimo y nos comemos un kebap (son ya las 16). Una vuelta más y nos vamos al coche a pagar un poco más de parking y quedarnos un rato más en la playa.

A las 18:30 nos vamos. Pasamos por La Spezia para localizar la estación de tren. Es una ciudad portuaria bastante fea. Nos vamos al hotel a ducharnos y salir a dar una vuelta. Al final, cenamos en la Locanda del viandante, que es el restaurante del hotel. 27€






DIA 15 – Martes 17 de Junio – Cinqueterre

Nos levantamos a las 8. El desayuno buffet está bien. Tartas, bollos, capuchino, tostadas, embutido, fruta, yogures, zumos,… Sobre las 10, cogemos el coche y vamos a La Spezia (7km). Casi toda la ciudad es con zonas de OTA, pero encontramos en Via Italia, una parte que no lo es, y lo dejamos ahí. Al lado, hay una I turística y preguntamos por la estación de tren. Nos marca el camino en una mapa y vamos andando. Tardamos 15 minutos. Allí, hay una oficina de información del parque natural de cinque terre. Compramos dos cinqueterre card que vale para un día y sirve para tren, caminos, ascensores y autobús. 8€ cada uno.

 Cogemos el tren (validando el ticket en la máquina amarilla) y en 9 minutos estamos en Riomaggiore. Damos una vuelta por el pueblo y cogemos la Via del Amore, que une Riomaggiore con Manarola. Son unos 20 minutos (1km) andando al borde de los acantilados. Se hace muy fácil, todo llano.


En Manarola, damos una vuelta por el pueblo. Son todos muy parecidos, de calles empinadas y casas de colores, aunque lo imaginábamos más bonito, la verdad es que no está demasiado cuidado.


De Manarola a Corniglia vamos en tren (4 min). Se puede hacer todo el recorrido entre los 5 pueblos andando. Aquí, al bajar del tren cogemos un bus que sube a la plaza, ya que hay mucho camino para subir. Enseguida llega arriba. Recorremos el pueblo, entramos en un ciber a mirar el correo, cogemos el bus para volver abajo y volvemos al tren. En la estación, conocemos a una pareja de hermanos de Eibar, bastante casualidad, ya que casi no hay turistas españoles por esta zona.


Vamos en tren a Vernazza, donde hay una playita muy pequeña. Nos sentamos a comer un par de sándwiches y compramos un helado. Volvemos a la estación. Cogemos el tren para Monterosso al Mare, último de los 5 pueblos. Este tiene playa por todo lo largo. Casi toda es de pago, lo que significa que tiene partes cercadas y puestas hamacas y tienes que pagar par poder bajar. Encontramos un trozo libre. Menos mal que no hemos pagado, porque llegamos a las 17 y sobres las 17:20, vemos que están recogiendo las hamacas y sombrillas. En fin,… Sobre las 19 damos una vueltilla por el pueblo y cogemos el tren para volver a La Spezia. Tenemos suerte y es un tren directo, así que en 5 minutos hemos llegado.


Vamos al coche y volvemos a Vezzano Ligure. Ducha y bajamos a cenar. Otra vez a la Locanda del Viandante, ya que la pizzería que hay enfrente está cerrada hoy. Pasta con funghi (setas), raviolis, agua, vino, tiramisú casero (muy bueno) y café. 30 €. Mientras estamos cenando, cae una buena tormenta.

DIA 16 – Miércoles 18 de Junio – De Liguria a Campania

Sobre las 10 salimos dirección a Sorrento. Son unos 650 km. Llegamos sobre las 18:30. Al final nos liamos un poco porque no está muy bien indicado el hotel y tenemos que preguntar a unas cuantas personas. El hotel es un bed & breakfast, se llama Il Mirto Bianco


Via Ferrella, 3 - 80065 Sant'Agnello di Sorrento (NA) ITALY
Mobile: +39 3939995522 - Fax +39 0813615001E-mail: info@ilmirtobianco.it

La habitación está bien, aunque es el más sencillo de cuantos hemos estado. Deshacemos las maletas y subimos a tomar el sol a la terraza y descansar un poco del viaje. Hace muy buen día. Nos dice la señora del hotel, Ursula, que es el primer día que hace bueno.

Nos cambiamos y nos vamos a Sorrento a la zona del puerto a cenar. Cogemos el coche, ya que hotel está en el barrio de Sant’Agnello y queda lejos para ir andando. Entramos en la Taverna dell’800. Pasta, escalopines, patatas fritas, cerveza, vino y café 30,50€.





Se nota que en este pueblo hay muchos guiris, ingleses y alemanes.

Damos una vuelta y volvemos al hotel.


DIA 17 – Jueves 19 de Junio – Campania (Pompeya)

Nos levantamos sobre las 9. El desayuno es bastante cutre y Ursula muy pesada. Tarda muchísimo en traernos el café.

Salimos para Pompeya. Si vais con GPS o buscáis en Via Michelin, poned Pompei Scavi, para que os lleve a las ruinas, sino, os lleva al pueblo moderno. Está a unos 25 km. El coche hay que dejarlo fuera en parkings. Lo dejamos en uno y cuando vemos que es a 3 € la hora, le decimos que vamos a estar todo el día y que nos vamos a buscar otro sitio. Nos dice que 10€ por todo el día. Nosotros decimos 6, al final nos deja por 7. En el parking pone que si cenas allí, te dejan dejar el coche gratis, pero cuidado, porque nos cuentan unos chicos en el hotel al día siguiente, que para que el parking sea gratis, te tienes que gastar en la cena, por lo menos 45€, menudo morro tienen.

La entrada a las ruinas cuesta 11€.


Si queréis visitar erculano, boscoreale, oplontis y stabia, hay entrada conjunta. Cuando entramos son las 11:45, hace bastante sol y calor. Si no lleváis agua ni comida, comprad fuera, antes de entrar, dentro, no vemos ningún sitio donde vendan nada. Vimos un restaurante al final del todo, cuando ya salíamos.

La ciudad es una pasada, hay casas conservadas genial, con mosaicos, pinturas. Con la entrada no te dan un plano ni nada, tenéis que ir a la caseta de información y pedir un plano y una guía (hay en castellano). En la guía vienen los números (como en las audioguías) y contado lo que es cada cosa. La verdad, es que sin plano, tiene que ser un poco difícil. No entréis sin conseguir uno. Supongo que no lo dan con la entrada para porque lo habrán pedido los de los puestos que hay fuera y tratan de venderte uno. Nos hacemos un planning de cómo vamos a recorrer la ciudad y vamos siguiéndolo.

Al final, estamos hasta las 19:15, un cuarto de hora antes de que cierren y hay algunas casas que no hemos visto. Acabas cansado, los pies llenos de polvo, pero merece la pena, es una auténtica pasada. Llevad calzado muy cómodo porque el suelo es de polvo y piedras. Tampoco está mal un sombrero y crema protectora.

Al salir, nos tomamos un granizado de naranja natural en un puesto enfrente de las taquillas (3€ cada uno). Está muy bueno. Volvemos al hotel a ducharnos, estamos destrozados. A las 23 bajamos a Sorrento a cenar al Villa Rubinacci di Tuttomare en Via Correale 25. Pasta, pizza, vino, agua y café 27€.




DIA 18 – Viernes 20 de Junio – Campania (Ravello, Maiore, Amalfi)

Nos levantamos a las 9 y, en la mesa de desayuno conocemos a una pareja de alemanes muy simpáticos. Nos ponemos a hablar de un montón de cosas, total que para cuando salimos son las 12. Nos vamos hacia Ravello, son casi 40 km, pero tardamos unas 2 horas, por el camino de curvas y porque paramos algunas veces a fotografiar el paisaje. Ravello es la ciudad de la música, tiene un festival que dura meses. Es un pueblo pequeño, pero muy bonito. Si aparcas en el pueblo hay que pagar 3€ la hora. Lo dejamos en la carretera a 5 minutos andando. Recorremos el pueblo, San Giovanni del Toro, el Duomo, Villa Rufolo, el convento de San Francisco, Villa Cimbrone. A las 16 paramos en una terraza a comer un bocadillo y una coca-cola (17€).

De aquí, bajamos a Maiore, un pueblo costero con playa. Ponemos 2 horas de parking (2€/hora) y nos vamos a la playa a refrescarnos un poco. Hoy hace mucho calor.


 A las 19 nos vamos para Amalfi, aparcamos por la carretera. Hay muchísimos coches, en el pueblo es casi imposible dejarlo y además, es de pago. Tenemos que andar unos 15 minutos y bajar unas escaleras. Llegamos a la zona del puerto. Vamos a la plaza del duomo. La catedral es impresionante, con mosaicos en la parte de arriba. Es un poco tarde, pero está abierta porque hay un coro cantando. Por dentro también es muy bonita. Damos una vuelta por el pueblo y buscamos un sitio para cenar. Terminamos en la Trattoria da Memé en Salita Marima Sebaste 8 que está subiendo por unas escaleras a mano izquierda, subiendo la calle que sale de la plaza del duomo. Se come genial y muy bien de precio. Pasta con almejas, langostinos y mejillones y gnochies con cigalas, vino y cerveza y café, 26€. La pasta está buenísima, muy recomendable.


Son casi las 23 y volvemos para Sorrento. Tardamos casi una hora.

DIA 19 – Sábado 21 de Junio – Campania (Grutta dello esmeraldo, Praiano, Positano)

Nos levantamos sobre las 9 y desayunamos tranquilamente, charlando con la pareja de alemanes. Nos vamos a la grutta dello esmeraldo, cerca de amalfi. Según las fotos, es como la de capri, pero verde en vez de azul. Nos cobran 5 €. Se puede dejar el coche en la parte de arriba (gratis con la entrada a la gruta). Se bajan unas pocas escaleras y luego un ascensor. Te subes en un barquito y te dan una vuelta por la gruta. Es pequeña, dura unos 15 minutos. El agua tiene color verde. No está mal, pero tampoco ninguna maravilla.


De ahí nos vamos a Praiano. Hace mucho calor. Vemos una iglesia y parece que no hay mucho más que hacer aquí. El coche lo hemos dejado por la carretera y andamos unos 15 minutos.


De aquí nos vamos a Positano. Dejamos el coche en la parte de arriba, en la carretera. Si lo quieres meter en el pueblo hay que pagar 3€/hora y además encontrar sitio, que casi no hay. Andamos unos 15 minutos y llegamos al pueblo. Tenemos que bajar un montón de escaleras hasta que llegamos a la playa. Compramos unos bocadillos, fruta y agua (18€) y nos vamos a la playa.


Hay una parte libre y luego la típica de pago con hamacas y sombrillas. Este pueblo es el que mejor pinta tiene. Hoy hemos visto 2 ferraris pasando por esta zona. Sobre las 18:15, la playa se queda en sombra, pero se está bien, porque al sol hace mucho calor. Sobre las 19 nos vamos a dar una vuelta por el pueblo. A las 20 empezamos a nadar hacia el coche, tardamos una hora porque vamos subiendo por la carretera en vez de las escaleras que hemos usado para bajar. Antes de llegar al hotel, compramos una pizza y unas croquetas en un sitio que vemos hay muchos coches aparcados fuera. Se llama pizza Express y está genial. La pizza nos cuesta un poco más de 4 € y las hay todavía más baratas.




 Tienen unas familiares alargadas, gigantes, como de un metro de largas. La gente se las lleva como churros. Nos vamos al hotel a comernos la cena y preparar la maleta, que mañana salimos para Sicilia.

DIA 20 – Domingo 22 de Junio – De Campania a Sicilia (Palermo)

Nos levantamos a las 8, desayuno y al aeropuerto de Nápoles. Hay 55 km y tardamos una hora. No hay mucho tráfico, pero en sentido contrario (hacia las playas) hay una buena caravana. Dejamos el coche en europcar y un minibús nos lleva a la terminal en 5 minutos. El aeropuerto es muy pequeño, tiene 4 tiendas. Volamos con Air One, una compañía de bajo coste. Cuando vamos a facturar, nos dicen que el vuelo de las 14:10 no existe, que es a las 18, que los vuelos cambian muy a menudo. Mañana llamaremos para confirmar la vuelta, no sea que nos pase lo mismo. Son las 12, así que nos toca esperar 6 horas, intentaremos tomarlo con calma. Intentamos facturar, pero nos dicen que se muy pronto, que el aeropuerto es muy pequeño y que no pueden meter las maletas con tanta antelación. De repente, vemos en un panel, que el vuelo de Air One a Palermo es a las 16:30, vamos a preguntar y nos dicen que hasta las 18 no hay ninguno. Les decimos que los paneles informativos están mal, y no nos hacen caso. Este aeropuerto es un auténtico desastre. A las 15 vamos a comer algo y a facturar. Nos dicen que llevamos exceso de equipaje (10 kg) y tenemos que pagar 100€. Además, el troley de equipaje de mano pesa demasiado y sólo se permiten 7 kilos, así que nos dicen que no lo podemos llevar. Empezamos a sacar cosas y las metemos en la mochila y los bolsos. Conseguimos que pese 10 kilos y nos dejan pasarlo. A las 18:10, sale el vuelo, por lo menos es puntual. A las 19 llegamos a Palermo, tenemos que ir a Eurpcar. Justo enfrente de la salida del aeropuerto se coge el minibús que lleva a la zona de alquiler de coches. Nos dan un Twingo, bastante peor que el Bravo que hemos tenido hasta ahora. Para entrar en Palermo hay un poco de caravana, pero justo por la ciudad no hay ni un coche. Son las 21 y juega España con Italia en cuartos de final de la eurocopa. Realmente con el fútbol, se paraliza todo. Llegamos al hotel, aparcamos enfrente. Ponemos una hora de OTA para mañana (el horario es de 8 a 14 y de 16 a 20) por 0,75. La tarjeta nos la venden en el hotel. El hotel es el Mercure Centro Palermo 4*
 www.mercure.com/mercure/fichehotel/gb/mer/5932/fiche_hotel.shtml

Via Mariano Stabile 112  90139 PALERMO - ITALY


Hotel code : 5932 - Tel : (+39)091/324911 - Fax : (+39)091/6116822 - @ : mercurepalermo@metha.com

Dejamos las cosas y salimos a dar una vuelta por la parte histórica (estamos a 5 minutos andando). La verdad, que tiene edificios bonitos, pero muy estropeados y sucios. Vamos por Via Roma, pasamos por algunas plazas e iglesias. Nos paramos a cenar en Il Proverbio. Muy bien, 23 €, 2 platos de pasta, 2 cervezas italianas (de 66cl) y café. Nos ponemos fuera, en una terraza. Es el final del partido y están un poco nerviosos, sobre todo cuando toca la tanda de penalties. Al final, gana España y se quedan un poco tristes. Vamos hacia cuatro cantos y vemos la Piazza Pretoria, con una fuente impresionante en medio. Es una pena que sea tan tarde (las 12 de la noche) para poder disfrutar un poco más. Volvemos al hotel.

DIA 21 – Lunes 23 de Junio – Sicilia (Cefalú, Reserva natural dello Zingaro)

Hoy nos levantamos antes, a las 7 porque queremos ir a dos sitios que están direcciones contrarias. El desayuno está muy bien, buffete con muchas cosas. Primero vamos a Cefalú, un pueblecito costero a 67 km de Palermo (0,8€ de peaje). Es una de las típicas postales sicilianas con la roca de fondo. Estamos de 10 a 12, visitamos la catedral y callejeamos. En el centro, sólo pueden aparcar residentes o sino, pagando, pero te sales un para de calles y puedes dejar el coche sin pagar. El ambiente es turístico y muy tranquilo, tal vez por que es lunes.


De aquí vamos a Castellamare del Golfo, a 137 km para ir a la reserva dello Zingaro. Hay que seguir las indicaciones hacia Scopello y Reserva natural. Se deja el coche delante de la taquilla (gratis) y cobran 3€ a cada uno por entrar.



Te dan un mapa y te cuentan lo que se tarda en ir andando a cada cala. La más lejana, 6 horas. Esa es la primera si se hace la ruta desde San Vito do Capo. Nos quedamos en la segunda cala, es preciosa, pequeñita, de aguas cristalinas, supertransparentes. Lo único malo, es que no es de arena, sino piedras pequeñas, pero se está muy bien. En la parte izquierda empieza la sombra sobre las 16:30, y para las 18 está la playa entera en sombra. A las 18:30 nos vamos para el hotel, ducha y salimos a las 20:30 a dar una vuelta y cenar. Encontramos un sitio que tiene mucha gente sentada fuera. Se llama La Traviata, en Vicolo S.Antonino 1. Está muy bien, tiene comida italiana y también cosas tunecinas.





Antes de cenar, pasamos por la plaza Verdi y vemos el Teatro Máximo, realmente impresionante. Pasamos por más edificios, preciosos. La verdad es que Palermo nos sorprende gratamente y nos da pena no verlo más en profundidad. Si tuviera que volver a hacerlo, esta mañana, en vez de ir a Cefalú, nos teníamos que haber dedicado a Palermo más detenidamente. Por la zona donde cenamos hay bastante ambiente, terrazas para cenar, tomar algo, música en directo,… Es por la parte de atrás del edificio de Correos (via Roma). Nos vamos para el hotel.
DIA 22 – Martes 24 de Junio – Sicilia (Agrigento)

Nos levantamos a las 7, desayuno y hacia Agrigento. Tenemos 127 km. El hotel Kore 4* está en Villagio Mosé a 5km de Agrigento y nos cuesta un poco encontrarlo.
www.hotelkore.com
Via Leonardo Sciascia s.n.
92100 Agrigento

Tel. 0922/653111   Fax. 0922/656100






Dejamos las maletas en la habitación y nos vamos para los templos. Está señalizado todo el tiempo, además lo hemos visto antes por la carretera. Dejamos el coche en el parking (2€ por 3 horas). Las entradas valen 8 €. Hay que entrar a dos sitios diferentes, por un lado están el Templo de Zeus Olímpico, Templo de los Dióscuros, Santuario de Demetra e Kore y Templo de Asclepio; por otro lado (volviendo a pasar por un torno de entrada) están el Templo de Hércules, el Templo de la Concordia y el Templo de Hera. En esta parte, hay baños y bar-restaurante. Hay fuentes durante todo el recorrido, pero son de agua no potable. Estamos unas dos horas en total, tiempo más que suficientes para hacer la visita. Se puede comprar entrada conjunta para el museo arqueológico, pero no nos interesa.


De aquí, nos vamos a Scala Dei Turchi, una playa con terrazas naturales blancas. Hay que seguir las indicaciones a Porto Empedocle y Realmonte. En Porto Empedocle paramos a comprar unos bocadillos, arancinos (bolas de arroz rellenas de carne y empanadas, buenísimas) y agua. Llegamos a la parte de arriba de arriba de la playa, pero no vemos por donde bajar. Nos quedamos en un sitio desde donde hacer unas fotos y vamos a buscar una playa que se llama Torre Salsa que nos ha recomendado la chica de información del Valle de los templos. Es un parque natural. Hay que seguir indicaciones hacia Torre Salsa y luego hacia Ermitano y un símbolo de playa. Nos cuesta bastante encontrarlo, hay que meterse por caminos sin asfaltar y luego bajar un poco andando. Es una playa grande, de agua cristalina, arena fina y blanca y apenas hay 10 personas, así que el esfuerzo ha merecido la pena. Sobre las 19:30 nos vamos para el hotel a cambiarnos y nos vamos a Agrigento a cenar. Cenamos en Per Baco en Vicolo Lo Presti 2. Tiene mesas en la calle, está bien. Risoto con funghi, pescado, ensalada, agua, cerveza, postre (cassata, típico de sicilia con queso ricota y pistachos, buenísimo) y café 35 €.



Damos una vuelta por Agrigento, los edificios están hechos polvo. Muchos tienen las fachadas medio destruidas, con el ladrillo visto. La verdad, que la ciudad necesita una buena remodelación. Aparte de los templos, poco más tiene que se salve.


DIA 23 – Miércoles 25 de Junio – Sicilia (Siracusa, Noto)

Nos levantamos a las 8, el desayuno buffet es normalito. Hacemos la maleta y nos dirigimos hacia Siracusa, a algo más de 200 km, 2 horas 45 minutos según el navegador. Al final, pillamos atasco y tardamos un poco más en llegar. El hotel es el Mediterráneo.


Hotel Mediterraneo Via Tripoli, 40 - 96100 Siracusa - Italy - Italia - Tel:+39.0931.445047 Fax:+39.0931.1846492
Email: 
reservation@siracusahotelmediterraneo.com

Dejamos el coche aparcado en la calle con un papel que nos dan en el hotel para que no nos multen y no tener que pagar. Dejamos las cosas y nos vamos a Noto, a unos 35 km. Es un pueblo barroco que se destruyó en un terremoto en 1693 y lo volvieron a construir entero. Además tiene casi todos los edificios reformados en los últimos años. Creo que la catedral (increíble) la han reabierto este mes. La cúpula se cayó en 1996 y a raíz de eso empezaron a restaurar todos los edificios de la ciudad. Hay palacios e iglesias preciosos. En la iglesia de San Carlo, subimos al campanario (1,5€).


Os recomiendo subir, es una escalera de caracol muy pronunciada, pero no es muy alta y se ve el pueblo desde arriba precioso. Antes de visitarlo, entramos a comer a un restaurante, muy normal.

Estamos unas 3 horas en el pueblo y nos vamos hacia la playa. Como son las 18:30, nos quedamos en Lido di Noto, lo más cercano y encontramos una playita que no está justo en el paseo marítimo. Tiene poca gente, supongo que por la hora, y se está muy bien. Un bañito y descansamos un poco. Sobre las 20, nos vamos al hotel, ducha y buscamos un sitio para cenar. No hay mucho donde elegir, nos teníamos que haber ido a la zona de Ortigia, que es donde está todo.


DIA 24 – Jueves 26 de Junio – Sicilia (Siracusa)

Hoy toca quedarnos en Siracusa. Llegamos en 10 minutos andando a Ortigia, una islita unida por 2 puentes a Siracusa. Aquí se ven muchos turistas. Hay edificios preciosos, el duomo, tan bonito por fuera como por dentro. Estamos unas 3 horas recorriéndolo todo, realmente merece la pena. Sobre las 14, nos vamos al hotel para coger el coche y dirigirnos al parque arqueológico de la neapolis. Aquí, dejamos el coche fuera y nso cobran 2€ (tiempo ilimitado). La entrada nos cuesta 8€ y realmente no merece la pena. El anfiteatro está lleno de de asientos de madera, el teatro está muy mal conservado y lo de la oreja de Dionisio es una chufa. Decidimos comprar algo para comer y nos vamos a la playa Arenilla, la más cercana a Siracusa. En gran parte, es de pago, pero tiene una parte libre, como todas. Llegamos sobre las 16. A las 19 nos vamos para el hotel. Nos cambiamos y volvemos a Ortigia para cenar. Hay ambientillo, pero tranquilo. La plaza del duomo está muy bonita con los edificios iluminados, la gente sentada en las escaleras de la catedral, terrazas con gente cenando,… Cenamos en un chino para cambiar un poco. Es igual que los de España, 20 €.


 Es gracioso oir a los chinos hablar italiano con su peculiar acento. Después, tomamos una copa en Bagatto Il Pub, en la piazza S. Giuseppe. Tiene cocktails y terraza fuera (4€ cada combinado).





No vemos muchos sitios en los que poder tomar algo.
DIA 25 – Viernes 27 de Junio – Sicilia (Taormina)

Nos levantamos, desayuno y preparamos las maletas. Nos vamos a Taormina (118 km). Llegamos sobre las 12 (1.5€ de peaje).


El hotel es el Bay Palace 3*
http://www.baypalacehotel.it/

Bay Palace Hotel · Via Nazionale · 98030 Taormina Bay (Me) Sicily · tel. 0039 0942 626200 · fax 0039 0942 626199 · info@baypalacehotel.it


Taormina está en la parte de arriba del monte Tauro. El hotel está en Spisone, en la parte de abajo. La habitación es muy sencilla. Algunas tienen vistas al mar, pero la nuestra no. Es el hotel más sencillo de todo el viaje. Dejamos las cosas y nos vamos a la playa. Pasamos por Isola Bella. Es una playa muy pequeña, de piedra y hay mucha gente. Es bonita, pero demasiado urbana y decidimos buscar otra. Llegamos hasta Letojami y vamos a un trozo donde casi no hay nadie. No es de arena, sino de piedras pequeñas. Hoy hace mucho calor, hay que estar en el agua todo el tiempo. El agua está más fría que en otras zonas de la isla. Estamos hasta casi las 16, vamos a comprar una pizza y nos la comemos en la terraza del hotel. Nos cambiamos y vamos a Taormina. Hay que dejar el coche en la parte de abajo en un parking de pago y un autobús te lleva al pueblo. El precio del autobús está incluido en el parking.


El pueblo es super turístico, todo tiendas y restaurantes. Nos compramos una granita (granizado) y empezamos a andar por la calle principal hasta llegar a la catedral, que es pequeña y no muy bonota por dentro. Justo hay una boda y tenemos que esperar un poco para visitarla. Llegamos hasta el teatro griego , está cerrado, ya que cierra a las 19. De todas formas, después de la decepción de ayer en Siracusa, creo que no hubiéramos entrado.


Vamos a tomar algo al Hammameth en la plaza del Duomo. Ponen aperitivo con la consumición y es bastante contundente, patatas fritas, zanahoria, tomates, salsas, panecillos
 .




Vemos que en todos los sitios ponen algo para picar con la bebida. Seguimos dando una vuelta y buscamos un sitio para cenar. Se nota que aquí los precios son más caros. Pagamos 43€ por una cena muy parecida a la de otros días, que no había pasado de 30.





Vamos a coger el autobús que nos lleva al parking. 5 horas de parking más 1 € por poder el bus, total 9€.





DIA 26 – Sábado 28 de Junio – Sicilia (Taormina - Etna)

Nos levantamos a las 8. En este hotel, el desayuno es sólo hasta las 9. Bastante normalito. Hoy vamos al Etna. Ayer le pregunté al de recepción y me dijo que para ir no hace falta llegar hasta Catania, se puede coger la salida en Giarre (30 km 0.90€), así que hacemos eso. Una vez en Giarre, se siguen las indicaciones al Etna. Por una vez, está muy bien señalizado. Una vez allí, se deja el coche al lado del teleférico. Hay un hombre que lo ‘vigila’ y pide la voluntad. Vamos a una caseta que pone excursiones y nos dicen que era hasta las 10:30, que hasta mañana no se puede volver a subir. Nos vamos hasta la taquilla del teleférico y vemos que ahí también se puede comprar la excursión. Son 49.5€ cada uno por el teleférico, el autobús y el guía. Se puede pagar con tarjeta. Subimos en el teleférico. Está lloviendo y hace fresco. Nada que ver con el calor sofocante que hace en Taormina.

Una vez arriba, vamos hacia los autobuses y nos dicen que esperemos 10 minutos a que mejore un poco el tiempo. Entramos en la cafetería y los 10 minutos se convierten en hora y media. Al final dicen que no van a volver a subir en todo el día por la tormenta. Subimos un poco andando, pero como empieza otra vez a llover, lo dejamos y volvemos al teleférico. Lo han cerrado, y nos bajan en uno de los jeep buses. El camino es super zigzagueante y vas dando botes, pero el paisaje es muy curioso. El negro de la lava, mezclado con tierra roja y algunas plantas y flores que salen. Increíble. Al llegar abajo, vamos a la taquilla y nos devuelven 23€ a cada uno, lo correspondiente al guía y al bus.

Una vez abajo, hacia la izquierda, están los cráteres silvestres. Hay unos carteles amarillos indicando dónde es. Aquí se pasa gratis. Realmente es un paisaje precioso y extraño, muy diferente. Estamos un rato viéndolo tranquilamente.

Nos vamos a una playa que nos recomiendan en una oficina de turismo de uno de los pueblos por los que pasamos y que está en Fiumefreddo camino de Taormina. Es de piedra pequeña, el agua está bastante fría. Está bien, para ser sábado, no hay acumulación de gente, es muy larga. Estamos hasta las 19, vamos al hotel, nos cambiamos y bajamos a cenar a uno de los restaurantes que dan al mar. Se está muy bien con la brisa, 43€. Es raro que para ser un sitio turístico y de playa, se ve poco ambiente.

DIA 27 – Domingo 29 de Junio – Sicilia – vuelta a casa

Nos levantamos a las 4:45. Tenemos casi una hora al aeropuerto de Catania. Dejamos el coche de alquiler. En este aeropuerto, se va andando de la zona de alquileres a la Terminal, está al lado. A las 8:30 tenemos el vuelo a Nápoles. Es con Air One y esta ves no tenemos problema con el equipaje. Nos pasamos 4 kg, así que hemos conseguido quitar 6 desde el otro día.

El avión sale en hora y después en Nápoles el de ir a Madrid también.